Por la libertad: la vida
En Venezuela debemos estar dispuesto arriesgarlo todo, la libertad y hasta la vida para defendernos de la amenaza, del peor de los totalitarismo, el socialismo.
El socialismo no deja espacio para la libertad, porque controla los medios de producción, los negocios. La subsistencia depende totalmente, del gobierno: el empleo y la comida para nuestra familia.
Genera una total dependencia de la elite política gobernante. De una sociedad civilizada se pasa a una sociedad militarizada, que debe obedecer ciegamente, al comandante en jefe.
Venezuela a sido siempre un país con algo de democracia y de autoritarismo, algo de socialismo y de capitalismo, un país atrasado, a pesar del las inmensas riquezas naturales que Dios nos regalo. Nuestro presidente nos esta conduciendo peligrosamente, hacia más socialismo y menos democracia, cuando debería hacerlo hacia más capitalismo y menos autoritarismo. El pensamiento comunista nublo definitivamente su entendimiento.
La lucha por los valores de la libertad debe dar testimonio de nuestra fe cristiana y democrática. Nuestra lucha debe dejar claro, a nuestros conciudadanos y al mundo, los valores en los cuales creemos. Deberá estar basada en el amor al prójimo, ser democrática y pacifica. Mientras haya un camino para la paz, lo debemos tomar, sin importar lo angosto y lleno de obstáculos, que nos los pongan.
Debemos dar testimonio de nuestro valor y coraje, dando la cara, dispuestos a asumir los costos impuestos por una elite política autoritaria.
Frente al socialismo oponemos el capitalismo; frente al autoritarismo la democracia; frente al culto a la pobreza, el derecho a progresar; frente al fanatismo, que rinde culto a la muerte, nuestra fe en Dios.
Cumpliremos con los deberes que nuestra fe y conciencia, nos imponen. Si lo desean que vengan por nosotros, que los hemos de esperar de rodillas frente a Dios, nuestro único amo y señor; porque sólo ante Él nos postraremos. A los anticristos los enfrentaremos, sin caer en provocaciones, que les permitan dar rienda suelta a su furia violenta y represiva: con eso pueden contar. Lo arriesgaremos todo, porque estamos apoyados por Dios. Y a su voluntad nos plegamos.
Algunos supuestos opositores como Herman Escarrá y Pablo Medina, con un discurso abstencionista, violento y agresivo, presumiendo de guapos. Nos invitan a tomar atajos, a renunciar al camino democrático y pacifico, sin ninguna posibilidad de éxito, que solo permitiría cerrar de inmediato Globovisión, y consolidar muy rápidamente, una dictadura comunista.
El valor llegara el momento de demostrarlo: principalmente hablando con la verdad y defendiendo los medios de comunicación libres, arriesgándolo todo en la calle, con una desobediencia civil. Con todos dispuesto a llenar las cárceles si es necesario, para defender la libertad. Raúl Zapata 0414-815.1929 raulzapataa@hotmail.com.